viernes, 20 de abril de 2012

TRISTEZA



Una especie que evoluciona su
 naturaleza salvaje,está al acecho del tiempo
soñando y anhelando su encuentro
con su amada


Sus ojos amarillos dorados
sus dientes afilados diseñados para contenerla
estresa a su manada aullando por no poder volar
desde la densidad del bosque 
sus aullidos se han comunicado


El aullido proviene de un lobo adulto
que ha quedado prendado a su hermosura
sin poder saltar el abismo que los separa
condenado a vivir sin su piel


Se acerca a beber agua 
y ve sus ojos reflejados sin resplandor
sin el brillo que alguna vez tuvo
que dura injusticia le ha tocado vivir
su corazón está lastimado,
su esperanza se desvanece,
solo quedan sus aullidos
comunicando tristeza


Ella muere al otro lado del abismo
sus lágrimas caen como rocío dando paso a la vida
no sabe que todas las bestias 
murmuran que el viento lleva noticias
no se percata que la luna guarda la imagen
de su amado aullando exponiendo sus entrañas


Se escucha un último aullido desesperado
Él está agonizante en la luna
Ella posa su mirada en su imagen 
Mientras una bruma espesa apaga su mirada
Su cuerpo ha quedado tendido en reposo


Él se rinde al cansancio
Quieto, en silencio
Con la mirada ciega hasta la eternidad

KATHERINA






LUNA











Luna que no me temes...!

Solitaria en la noche como yo te encuentras.

libre rotas a traves de la tierra

como yo lo hago en mi bosque perfumado.

Entre mi sueño profundo...,

se filtran como el eter tus palidos reflejos.

despierto asustado pues pienso que es de dia...


Te veo nuevamente y te observo perfecta!

Luna que todo ves y todo observas.

No me dejes solo y triste en esta larga agonia

Ya nadie se acerca, ya nadie me mima

solo tu presencia me obsequia armonia

Aullo solo... imperceptible en la noche

busco compania en esta estepa fria

Revuelvo bosques, penetro cavernas

corro por llanuras.., por llanuras vacias


Pero el amor me hace burlas esquivas!

llevo siglos recorriendo las noches

siempre solo.., siempre ajeno y estepario

Solo me conmueve la luz de tu blancura

Luna, luna blanca..,

eres tierna y afable compañia

aullo excitado cada vez que te veo

pues se que por tu parte nunca me has abandonado.

LA RABIA DEL LOBO

                                                                                                                                           

El lobo
no duerme esta noche,
siente la rabia
azotando su sien.
El lobo
acecha el horizonte,
sabe que hoy no estará solo,
El lobo
inquieto camina despacio
siente los nervios,
se mantiene sereno.
Está cansado y triste
pero sus fuerzas no han cedido.
Silencio.
Se escucha un perro ladrar
otro a lo lejos aullar,
los muy miserables
intentan imitarle,
pues también saben
llorar a la luna.
El lobo
siente que la furia
eriza su pelaje,
los ojos se inyectan en sangre
y un gruñido
rasga su garganta.
Los perros
aúllan con mas fuerza,
pidiendo prestada
un poco de atención,
intentan destacar ante los demás.
El lobo
contempla la escena,
una de las más
patéticas de su vida.
Los perros
se sienten orgullosos,
piensan que están haciendo
una fructuosa tarea.
El lobo
continua gruñendo,
rasgándose la garganta
dando vueltas a su alrededor.
La luna
se mantiene callada
majestuosa desde lo mas alto
contemplando la escena
entre nubes y estrellas.
El atronador aullido del lobo
golpea en la mente
de todo ser viviente
causando un incómodo silencio
y una situación inquietante.
Se despierta la rabia
y reacciona ferozmente 
desgarrando trozos de carne
con sucias garras,
mordiendo cuellos,
rompiendo yugulares
para terminar con los aullidos
de los apestosos perros
y recrearse mas tarde
con sus cadáveres
desgarrándoles el pelaje
dejando la carne abierta
para que los buitres a la mañana
tuvieran con que alimentarse
y continuar así
con su mísera vida.
Abriéndose paso
por un río de sangre,
para llegar a la luna
y así hacerle el amor
el resto de la noche
y que los miserables perros
que queden agonizantes
contemplasen la escena
sin poder hacer nada,
porque la luna
tenía un dueño,
el único animal
entre todos los hombres
capaz de reventar tímpanos
con ladridos
y hacerlos sangrar
con un atronador gruñido.
El lobo
es el único,
que sabe aullar a la luna.
El lobo,
marca su territorio
a mordiscos y zarpazos.
El lobo,
defiende lo que ama.
Por encima de todo.