Shasta Lake, California - Otra familia indígena fue atacado presuntamente por un supremacista aparentemente autoproclamado blanco que asaltado Sage Frank, 18, en la tarde del 23 de agosto cuando él y dos primos fueron skate en la calle frente a su casa.
Frank, un nuevo estudiante en Shasta Community College, dijo que se sorprendió cuando Charles Petrisevac, de 36 años, saltó de los arbustos cerca de la casa de Frank gritando "orgullo blanco", entonces habría amenazado con matar a los niños, ya que participan en la confrontación verbal.
Petrisevac, que es calvo con perilla y bigote castaño, fue descrito como el torso desnudo, sólo llevaba pantalones cortos, con tatuajes en el pecho y los hombros cuando él se acercó a los muchachos que llevan una lata de cerveza, de acuerdo con Frank.
"Me dijo: 'Voy a matar negros de mierda' y se mantuvo llamando nombres", dijo Frank. "Entonces, de repente me lechón perforado, golpeándome en el ojo, y se escapó a través de los arbustos. Fui tras él. "
La madre de Frank, abril Carmelo, ponía su hijo de siete meses de edad, hijo adoptivo a la cama cuando su hijo menor corrió hacia la casa gritando "alguien está bateando hermano".
Carmelo entregó el bebé a su esposo y se metió en su camioneta a buscar a su hijo. Vio a su hijo Petrisevac persiguiendo por la calle y alcanzó a ellos en una intersección. Según los informes, vio Petrisevac apuntando con un arma a Sage y condujo su camioneta entre ellos para que dejara de disparar a su hijo. Petrisevac luego se volvió hacia ella.
"Entonces apuntó el arma hacia mí, gritando" orgullo blanco "y dijo:" te voy a matar, también, negro de mierda ", dijo.
Carmelo se quedó en su vehículo con su mano sobre la bocina como una copia de seguridad de tráfico, y continuó gritando Petrisevac amenazas y el ritmo delante de su coche.
"Yo estaba gritando para que la gente llame a la policía con su arma apuntando a mi cuando apareció otro hombre blanco, que llevaba sin camisa, con tatuajes en el pecho. Él comenzó a golpear su pecho, levantó el puño y gritó "Nación Aria". Yo no podía creer lo que estaba sucediendo a nosotros ", dijo.
Cuando la policía finalmente llegó, Petrisevac se había quitado la pistola hacia el interior de su casa, dijo Carmelo, y dijo a la policía que él no tenía ningún arma.
"Estaba casualmente apoyándose en el capó del coche de la policía con los brazos cruzados mientras lo interrogaban y nos pareció amable con él", dijo Carmelo: "Yo les dije que estaba mintiendo, pero me dio instrucciones de ir a sentarse en mi coche . "
Ella dijo que le preguntó más tarde a identificarse e interrogado brevemente en su casa. Insistió en que la policía reportar el ataque como un crimen de odio.
Familia busca protección
A la mañana siguiente, Carmelo se sorprendió al darse cuenta de que la policía no había arrestado al hombre que amenazaba a su familia cuando Petrisevac apareció corriendo en frente de su casa cuando salía para el trabajo con su bebé. Al parecer se detuvo a empujar el pecho y gruñir en voz alta, ella dijo.
Horrorizado que había vuelto a burlarse de ellos, Carmelo se enteró de que no se habían presentado cargos contra Petrisevac, a pesar del hecho de que ella había declarado que había asaltado verbalmente y físicamente a su hijo, la amenazó y de su hijo con un arma, y tiene un previo registro de acoso contra una mujer hispana.
A continuación, solicitó una orden de restricción contra Petrisevac por acoso civil, citando un crimen de odio, y cuatro días más tarde se le concedió una orden de restricción temporal hasta que una audiencia judicial el 6 de septiembre para determinar nuevas medidas.
Carmelo, un especialista en educación indígena de 13 años, que supervisa los programas de educación para indios del condado de Shasta 26 escuelas, es Greenville Rancheria Maidu y lleva las marcas tradicionales femeninos de Maidu mujeres (siete barras verticales en la barbilla). Su marido Cameron Frank, está inscrito Sisseton Wahpeton Oyate.
La familia ha vivido en la misma casa desde hace 16 años, pero se produjo un cambio en el vecindario una vez, tranquila cuando llegaron varios recién llegados hace unos cuatro años, Carmelo, dijo.
"Nos dimos cuenta de que algunos racistas se había mudado al barrio, pero los dejamos solos. Ellos hicieron sentir su presencia con carretadas de adolescentes circulen por ella gritando "orgullo blanco", y hasta los niños pequeños en bicicleta gritando obscenidades y llamándonos negros. Es feo, pero tratamos de ignorarlo ", dijo.
Sage Frank y sus primos dicho en muchas ocasiones que vieron furgones de la unidad de los adolescentes y las señales de punto a mano pistolas burlándose de ellos. Pocas semanas atrás, otro incidente de acoso ocurrió cuando el hijo menor de Carmelo fue asaltado verbalmente en un parque local. Carmelo denunció el incidente a la policía, sin resultados.
En los últimos días, la tienda de conveniencia local fue etiquetado con el símbolo de la esvástica cerca de Carmelo y el hogar de Frank donde habitualmente compras.
Sage Frank, 18 años, está al lado de una tienda de conveniencia en su casa, donde una cruz gamada fue pintada con aerosol algún tiempo después de que fue supuestamente atacado. (Marc Dadigan)
El racismo institucional en el juego
Carmelo inmediatamente se dirigió a locales aliados contra el racismo y el Consejo de Shasta City para el apoyo en el tratamiento de los ataques.
Ella dijo que hay poco reconocimiento de la historia de la ciudad de la violencia y el desplazamiento forzado en contra de los Pueblos Indígenas de California en los programas escolares locales, y que facilita la incomprensión, el odio y el racismo.
En una ciudad llena reunión del Consejo de 5 de septiembre, ella dijo: "El asalto físico de mi hijo, el lenguaje utilizado por estos dos hombres y las amenazas de muerte contra nos hizo con los medios para llevar a cabo hace de este un crimen de odio. El racismo está vivo en la Ciudad de Shasta Lake y tiene consecuencias potencialmente fatales.
"Es importante que el ayuntamiento debe tomar este crimen de odio en serio y para asegurar futuros crímenes de odio están mejor documentadas. Hay más de 1.000 residentes de la ciudad que se identifican como nativos americanos o nativos de Alaska, convirtiéndonos en el grupo minoritario más prominente de la ciudad ", dijo.
"Hay que asegurarse de que sus políticas antirracistas son bien conocidos y mejorado debido a la singular relación histórica entre los californianos indígenas y las instituciones del Estado".
Carmelo señaló que los órganos democráticamente elegidos, como los ayuntamientos se han utilizado históricamente para organizar, financiar y cometer actos de violencia contra los indios de California. El genocidio, el robo de la tierra y la limpieza étnica son parte de la historia del condado de Shasta y Shasta Lake City, dijo, pidiendo a las autoridades a adoptar una postura más vocal y más activa contra el racismo.
La formación de la comisión de derechos humanos
"Este crimen de odio no es sólo un ataque a mi hijo y yo, como individuos, es un ataque a la integridad de la nación soberana de Greenville ranchería de indios Maidu. Insto a la ciudad para unirse a mi hijo y yo a medida que avanzamos para establecer una comisión de derechos humanos rigen por Greenville Ranchería ".
Carmelo dijo que tomó la idea de la formación de la Comisión de Derechos Humanos de la Nación Navajo de Derechos y considera que su papel vital para hacer frente a las preocupaciones de los ciudadanos Ranchería que viven en zonas urbanas, ya que frente al racismo, la discriminación y otras violaciónes de derechos humanos.
"Tenemos que invitar a otras tribus y ciudades para celebrar memorandos de acuerdos con Greenville Ranchería como nos esforzamos para prevenir los crímenes de odio, eliminar el racismo y mejorar la calidad de vida de todos los que viven en la Ciudad de Shasta Lake."
Carmelo da la bienvenida a las aportaciones de otras víctimas de la violencia y los que quieren hacer frente a racismo. Ella está a la espera de un informe policial completo y pidiendo a la Fiscalía para perseguir el ataque como un crimen de odio en virtud de California y las leyes federales.
Este es el cuarto ataque de familias indígenas que en los últimos 15 meses en la región de la Sierra Nevada.
En mayo de 2011, Johnny, Lisa y Bonta Ali habrían sido atacados y golpeados por tres jóvenes en Fernley, Nevada que aún no han sido acusados.
El 14 de junio, Patty Dawson , un Apache San Carlos y la enfermera de Navajo, fue perseguido por las calles de la ciudad y golpeado hasta quedar inconsciente por Jennifer Fraser que se fija para ser juzgado el 17 de septiembre en la Corte del Condado de Fresno por cargos de asalto agravado.
Documentos judiciales indican que Fraser tiene vínculos anteriores con la supremacía blanca, y cientos de simpatizantes han escrito al juez y protestó en la corte pidiendo que el caso sea juzgado como un crimen de odio. El caso se retrasó siete veces y el fiscal del distrito estaba presionando para un acuerdo silencioso, pero la familia Dawson ha insistido en un juicio, ahora programada para septiembre 17-20 en Fresno.
El otoño pasado, un joven fue atacado y golpeado en Chico, California al parecer por un grupo de supremacistas blancos, fue hospitalizado en estado de coma, de acuerdo con la familia.
Carmelo dijo que es tiempo para la gente para hacer frente a la creciente violencia contra los pueblos indígenas.
"El racismo no es un asunto muerto en esta ciudad. Está vivo y bien, y que se perpetúa de generación en generación por la ignorancia y el estancamiento de los órganos de gobierno ", dijo.
"Para que no se repita la historia, debemos tomar medidas, la Ciudad de Shasta Lake tiene que tomar una postura más vocal y más activa contra el racismo. "
Al cierre de esta edición, Carmelo todavía estaba tratando de obtener una copia del informe policial.
Para más información sobre los crímenes de odio Leído: Comprender los crímenes motivados por el odio racista en los Estados Unidos
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